Por fin, después de cuatro meses y medio fuera, volvía a España. No me puedo quejar de las experiencias vividas o de la gente conocida, pero sí que había muchas ganas por volver a a casa. Tantas, que observando desde la ventanilla del avión, a escasos 10 minutos de llegar al aeropuerto de Barajas, tuve la oportunidad de obtener estas fantásticas vistas:
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Almadrones y la Vega del Badiel a vista de avión. 6/7/2013. |
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